El reconocimiento de los derechos humanos en México ha implicado un proceso arduo, de muchos años, que desde la sociedad civil organizada se ha impulsado para lograr la reivindicación de la dignidad de todas las personas, sobre todo la de quienes han sido víctimas de un sistema económico y social profundamente desigual. Garantizar el derecho a una alimentación adecuada en este marco debe representar una prioridad, no sólo por ser un derecho que con su ejercicio permite el goce de otros derechos, sino también por el contexto de desigualdad que deriva en altos índices de pobreza y hambre para la población en el paíshttps://www.jornada.com.mx/2022/03/26/opinion/012a1pol