Reforma a la Ley General de Salud para fomentar bioinsumos y establecer prohibición progresiva de Plaguicidas Altamente Peligrosos (PAP)
¿De qué trata?
En el senado de la república se está votando una propuesta de reforma de la Ley General de Salud para fomentar bioinsumos y sistemas agroecológicos y establecer un programa nacional de restricción y prohibición progresiva de Plaguicidas Altamente Peligrosos (PAP). Esta reforma fue presentada por la senadora por Tlaxcala Ana Lilia Rivera Rivera en la Reunión Extraordinaria del Senado el pasado 29 de septiembre de 2022. Se turno a las Comisiones de Salud y Estudios Legislativos Segunda.
Desde Semillas de Vida A.C., como parte de la Campaña Nacional Sin Maíz No Hay País (CNSMNHP), estamos en favor que se apruebe esta Reforma. Como dijimos en nuestro comunicado, estamos conscientes de que la agricultura industrial, que se caracteriza por el uso de maquinaria, de elevados volúmenes de agua extraídos del subsuelo mediante bombas que requieren de combustibles fósiles, de agroquímicos como los plaguicidas (herbicidas, insecticidas, fungicidas etc.) y fertilizantes sintéticos, así como por el uso de semillas patentadas, es una de las causas principales de la pérdida de biodiversidad, la desertificación, la contaminación de suelos y cuerpos de agua, y la emisión de gases de efecto invernadero.
Recientemente senadorxs de diversos partidos políticos, conscientes de esta situación, han presentado en el Senado de la República diversas iniciativas que señalan la necesidad de prohibir el glifosato. Es el caso de la iniciativa de reforma a la Ley General de Salud que ha recibido hasta el momento el respaldo institucional de la Secretaría de Salud, de Conacyt, de SEMARNAT, y la Opinión Técnica favorable de la Subsecretaría de Autosuficiencia Alimentaria de SADER. Poder contar con una reglamentación específica sobre bioinsumos, ha sido una demanda de productores que buscan transitar hacia sistemas agrícolas agroecológicos, pues contribuiría en gran medida a la transición agroecológica para reducir la dependencia de insumos agrotóxicos. Hay que recordar que la agroecología no se limita a una mera sustitución de insumos o de prácticas agrícolas sino a la diversificación de los sistemas agrícolas que permitan una mayor resiliencia y equidad social, así como recuperar alimentos y semillas tradicionales.
Es necesario señalar que lo que se ha venido afirmando en los medios de comunicación masiva, en el sentido de que escasearán los alimentos y que será imposible la producción sin el apoyo de estos agrotóxicos, no responde a la realidad. A través de la promoción de alternativas exitosas que se han venido desarrollando con apoyos del Consejo Nacional de Ciencia y Tecnología (Conacyt) y de programas gubernamentales de acompañamiento técnico para asegurar la autosuficiencia alimentaria que ha impulsado la SADER, entre otros programas, se demuestra que sí es posible la sustitución paulatina de herbicidas tóxicos.
Quienes se oponen a estas medidas son las grandes empresas agroindustriales de México y del extranjero, las mismas que han promovido monocultivos de fatales consecuencias para el medio ambiente y la salud humana, como son la palma aceitera, el aguacate, la soya, frutas como la zarzamora y la frambuesa, o flores de ornato, entre otras, que requieren grandes cantidades de agrotóxicos y agua, y que en nada benefician a la alimentación diaria de las y los mexicanos. Asimismo, buscan promover semillas de maíz genéticamente modificada en función de sus ganancias, sin importarles contaminar los maíces nativos en el centro de origen. Estos grupos constituyen una minoría acostumbrada a grandes ganancias a costa del medio ambiente, de la salud, y de la biodiversidad, que es una de las mayores riquezas de México.
La agroindustria no tiene como fin alimentar al mundo sino producir insumos industriales, muchas veces nocivos para nuestra salud, y que es la agricultura familiar la que alimenta al mundo, pues produce 70 por ciento de los alimentos que se consumen. Es esa agricultura familiar y de mediana escala, la que, con técnicas agroecológicas sin agrotóxicos, puede coadyuvar para que podamos vivir en mejores condiciones medioambientales y de salud en México y en el mundo; pero sobre todo, la agroecología o agricultura regenerativa permite combatir el cambio climático, ya que captura el bióxido de carbono regresándolo a la tierra, su lugar natural, enriqueciéndola y contribuyendo a enfriar el planeta.
¿En qué estamos?
La reforma se tiene que aprobar primero en estas dos comisiones para luego pasar al pleno del senado y, ya aprobada en esta instancia, pasar por la cámara de diputados y, finalmente, ser publicada en el Diario Oficial de la Federación. La votación en estas dos comisiones se lleva a cabo el mismo día y estuvo agendada para el pasado 16 de noviembre pero la oposición la pospuso y estamos a la espera de una nueva fecha. Todo esto después de que se tuviera que reagendar ya que el senador Rafael Espino no convocó a la comisión que preside, Estudios Legislativos Segunda, por lo que a falta de quórum se tuvo que posponer.
Noticias:
“Sin maíz, no hay país, convoca la prohibición de plaguicidas altamente peligrosos” 11 octubre, 2022
“Discrepan senadores de Morena por prohibición del glifosato” 6 noviembre, 2022
“Frenan discusión de iniciativa sobre glifosato” 16 noviembre, 2022
“Pese a división, mayoría de Morena en Senado apoya prohibición de agrotóxicos” 19 noviembre, 2022