La agricultura se ha convertido en una de las principales herramientas de desarrollo económico de México desde la firma del acuerdo comercial de Norteamérica, en 1994; sin embargo, los trabajadores de ese sector padecen más desventajas que otros: bajos salarios, pocas prestaciones y privaciones de contrato laboral, entre otras.
Un estudio realizado por El Colegio de la Frontera Norte (Colef) y el Centro de Investigaciones y Estudios Superiores en Antropología Social, revela que la media nacional de ingresos mensuales para los jornaleros es de alrededor de 4 mil pesos. En Baja California –que concentra 2.3 por ciento de la fuerza laboral agrícola del país– se percibe casi el doble: 7 mil 680.